Acompañamos a un grupo reducido de niños para asegurar el respeto de los ritmos personales y las necesidades grupales.

Conjugamos el tiempo que requiere cada niño y su familia en el proceso de familiarización con las acompañantes y el espacio, para que la experiencia de incorporación sea amable y respetuosa.

Concebimos el espacio como un lugar vivo, nutrido por los materiales que cubren las necesidades de juego y movimiento propios de la etapa, que se transforma en base a la observación de las necesidades de cada una y del grupo presente.

Acompañamos el juego espontáneo, “la esencia de la vida libre, creativa e independiente, a través del juego,  las personas descubren todo su potencial como seres humanos.”

Brindamos un espacio acogedor, amable y relajado, con límites claros para sentir la seguridad física y emocional que habilite el despliegue personal.

    “Ojala podamos mirar a los niños y a las niñas no como proyectos de lo que serán sino como la perfección que ya son” Nuria Comonte

Nuestra formación, experiencia profesional y personal nos ha mostrado que las criaturas tienen la capacidad de desarrollarse de manera sana y plena en todos los ámbitos de la vida si se encuentran en un medio propicio, adaptado a sus necesidades, preparado para el despertar de su autonomía y acompañando con presencia desde el amor.

Sabemos que los primeros años de vida serán impronta de su desarrollo posterior y nos encanta acompañar este momento.

Con una mirada abierta, desde las teorías pedagogías apoyadas en el vínculo amoroso, en la observación y el respeto de los procesos vitales, con un profundo interés por conocer a cada una, favoreciendo la autonomía, la autoconciencia y la convivencia en los cuidados, acompañamos con el corazón.

Para los niños y niñas la seguridad y confianza en el mundo esta puesta en las figuras de apego, por eso animamos a los padres y madres a acompañar con tiempo y calma el proceso de adaptación al el espacio. Cada familia es un mundo, por eso cada proceso será diferente e iremos trazando un camino en la primera tutoría para conocer las necesidades y realidades de cada niño/a. En todos los casos construiremos nuevos vínculos seguros, para confiar y desplegarse en el mundo que se abre ante ellos/as.

Valoramos la comunicación abierta con las familias en el día a día, en tutorías para conocernos mas y profundizar en el conocimiento de las criaturas y reuniones grupales para enriquecer la la vida en común. Desde la aceptación del sentir y hacer de cada familia colaboramos mutuamente para propiciar una crianza respetuosa.

Sois bienvenidas a estar en el espacio para observar y sentir como se vive en un espacio de juego respetado.

“la presencia del adulto es lo único capaz de generar las redes neuronales básicas para el apego seguro” Fernanda Bocco

Desde las 9 de la mañana recibimos a las familias que van llegando a reencontrarse con las acompañantes y el espacio. Poco a poco, como un ritual, dejan su abrigo y su mochila con el almuerzo. Después de quitarse los zapatos  y despedirse del adulto que les ha traído entran en el espacio de juego.

Cada una decide a que actividad va a dedicarse, explorar sonidos,  nuevos retos físicos, observar, unirse al juego de otro; Cada una crea su juego y todas juntas componen una coreografía perfecta.

Nuestra nueva localización nos permite vivir de manera directa y diaria el contacto con la Naturaleza. Pudiendo disfrutar de todos los parques que están cerca del Ferial, como son el parque San Roque, parque Capitán Diego de Urbina … proporcionándoles asi experiencias únicas y necesarias que sólo en contacto con la Madre Tierra podemos encontrar..

Sobre las 13:30 comienza el cierre de la mañana, nos encontramos en un círculo, nuestro ritual de cierre  en el que alternamos cuentos, juegos de manos y canciones. Las familias están invitadas a participar de este momento cada vez que quieran.

Al terminar los acompañamos a prepararse para recibir a las familias que les recogen a las 14:00.

Para las familias que lo necesiten existe la opción de ampliar horario hasta las 15:30.

  “Los niños y niñas necesitan agua y comida para sobrevivir. Para vivir , necesitan presencia y juego”

Natalia Archilla Torres,
Madrid 1983

Siempre me atrajo el mundo de los cuidados, el juego , las relaciones humanas…por ello cuando pude comenzar a elegir mi formación curse Auxiliar de enfermería y  seguido de Jardín de Infancia, que me abrieron puertas para realizar la licenciatura de Pedagogía  en la Universidad Complutense de Madrid. Años de estudio y trabajo, que me llevaron a conocer muy de cerca las necesidades individuales en los diferentes procesos de la vida recién nacidos, adolescencia, vejez…  Todas ellas con una necesidad común, el amor auténtico y los cuidados.

Mujer, hija, hermana, madre, amiga, cuidadora y soñadora. Busco una crianza y educación que realmente respete las derivas individuales, libre de cargas y juicios. Para ello no falta el debate continuo que busca el camino en un aprendizaje constante de mi ser, tanto a nivel personal como profesional.

Cada uno de las caminos que voy desempeñando, cada caída y cada encuentro ayudan a completar quien soy ahora y como quiero estar en el mundo.

En el 2011 comienza la aventura de la maternidad, un primer hijo que no nació y que siempre me acompaña. Al año mi segundo embarazo,  llegó Antón revolucionando mis entrañas y conectando mi mundo consciente y la responsabilidad de acompañar el crecimiento continuo de una criatura.

En esta nueva aventura comenzamos hacer tribu y entramos en una asociación que nos acompaña a poner nombre y rumbo a nuestros instintos, nos trae revolucionarios aprendizajes para una vida consciente y activa.  Nuevos ingredientes alimentan mi transito en los cuidados como la psicología Humanista, la Educación creadora, Movimiento libre, Educación  activa …comienzan a dar sentido a una mirada que realmente encaja en mi sentir. Amasando estos aprendizajes, en 2015 realice el curso superior de Acompañamiento a la infancia y educación Respetuosa creado por “la Violeta”, adentrandome en las diferentes vertientes de la acompañamiento respetuoso (María Montessori, Waldorf, Emmi Pikler…).

Junto con otra compañera, damos salida al proyecto “el Ovillo” en Guadalajara,  acompañando a familias con criaturas desde el gateo hasta los 3 años. Con él, mi tercer embarazo y  la llegada de Lúa en 2015, nuevo revolcón a mi vida, nuevos aprendizajes y derivas crecen en mi. La necesidad de escucharme, viajar y vivir rodeada de naturaleza me inunda,  como familia decidimos continuar nuestra aventura en Mañufe, Pontevedra.

Aquí conozco a un grupo de mujeres con inquietudes diversas pero complementarias, compartimos una misma mirada hacía el ser humano y la necesidad de crear espacios de encuentro entre familias que cubran las necesidades que desde nuestras maternidades nos han ido surgiendo . Juntas damos forma a MilRamas, una cooperativa destinada al juego y el crecimiento, donde cada una desarrollará su proyectopersonal.

Comienzo a materializar lo que hacía años eran sueños, llega Nico mi cuarto embarazo. Inundando mi vida de nuevas luces, aventuras y aprendizajes. Mientras mi barriga crece, la cooperativa va tomando forma, va brotando y todo avanza. La llegada de Nico me lleva a la necesidad de volver a mis raíces, y a nuestra tribu. Como familia decidimos volver a Guadalajara, pero sin dejar atrás la cooperativa.

Se realiza un pago inicial de 50 euros para reservar plaza y pago de matrícula.

-Completa: de lunes a viernes de 9:00 a 14:00 hs, 300 euros mensuales.

-“A tu medida”: tres días consecutivos a la semana de 9.00 a 14:00 hs, 230 euros mensuales.

-Extensa: lunes a viernes de 9:00 a 15:30, 350 euros mensuales.